lunes, enero 31, 2005

Liar, Liar Y Bush dijo: hay que invadir Iraq porque es un país que posee armas de destrucción masiva. Al no encontrarse las susodichas armas, hubo que improvisar otra justificación. Y Bush dijo: hemos constatado y tenemos pruebas fehacientes de que el régimen de Saddam Hussein está vinculado a Bin Laden y a Al Qaeda, y por consiguiente al terrorismo islámico internacional que amenaza a todos los Estados libres y democráticos del mundo. Al no poder probarse dichos vínculos, la inventiva de los mandatarios americanos se puso a prueba, pero nos sorprendieron gratamente al darnos la explicación final. Y Bush dijo: debemos propagar la democracia y la libertad por todo el mundo, comenzando por Iraq, omitiendo claro está, que por todo el mundo se refiere a un número reducido de países, excluyendo aquellos en los que no haya petróleo, u otro fin económico que pueda beneficiar a EEUU. Y Bush dijo: Una vez derrocado el régimen de Saddam (aún retengo en la retina las imágenes de los soldados derribando la estátua de Hussein) Iraq celebrará las primeras elecciones democráticas de su historia. Y este es el resultado:
Para aquellos que crean que la democracia se impone a punta de pistola, decirles que están equivocados. Precisamente, la imposición mediante la violencia va en contra de los principios básicos de la democracia, por no mentar que el intervencionismo y la ocupación, de cualquier tipo, atenta contra la soberanía externa de cualquier Estado. Nada diferencia al senyor (por llamarle de algún modo) George W. Bush, de Ossasma Bin Laden. Nada diferencia al senyor George W. Bush de Adolf Hitler... bueno sí, Hitler tuvo el coraje de acabar con su vida, el pelele de Bush, seguro que ni siquiera podría con eso. Genocida sí, pero no con un par de webos. >> La farsa electoral en Iraq ha terminado como se preveía: con el aparente "triunfo" de las candidaturas únicas shií y kurda. De nada ha servido el constatar que las elecciones han sido ilegales puesto que proceden de un acto ilegal como la invasión de un país contraviniendo el Derecho Internacional; de nada ha servido constatar que las potencias ocupantes, especialmente los EEUU, han modificado a su antojo y según sus intereses la sociedad social, política y económica iraquí; de nada ha servido constatar la muerte de decenas de miles de iraquíes ­los muertos invisibles- y la destrucción de ciudades como Faluya; de nada ha servido constatar cómo los EEUU, de nuevo, utilizan armas prohibidas por el ordenamiento internacional como el napalm y las bombas de racimo; de nada ha servido constatar el nivel de degradación de las "democracias" con el uso de la tortura o campos de concentración como el de Guantánamo; de nada ha servido constatar que el Ejército de los EEUU ha sido el encargado de distribuir 60 millones de octavillas llamando a los iraquíes a participar y los países occidentales hayan financiado esas elecciones.Seguir leyendo